La vida de José Antonio “Toño” Zúñiga, un joven tianguista de Iztapalapa de 26 años, cambia para siempre cuando un lunes 12 de diciembre del 2005, una patrulla de la policía de la Ciudad de México lo arresta de forma abrupta sin justificar el motivo de su detención, para luego enterarse que ha sido acusado de Homicidio Calificado. Tras casi un año encerrado, los familiares y amigo de Zúñiga, contactan a los abogados Roberto Hernández y Layda Negrete, quienes toman el caso con la esperanza de reabrir su caso y probar la inocencia de Toño, en medio inconsistencias y un sistema judicial fallido…
“Me agarran y me dicen: Tú fuiste, tú fuiste, no te hagas pendejo”
La presunción de inocencia queda de lado, y lo que podría considerarse como un arresto al azar, termina con una condena de 20 años, precedido por un proceso lleno de incongruencias que sirven para este resultado. A pesar de que todo este planteamiento puede sonar completamente insólito, es una historia real.
Luego de que el abogado transformado en documentalista, Roberto Hernández, presentara el también polémico cortometraje documental, “El Túnel”, en el que mostró la injusticia y negligencia de la autoridad judicial mexicana, el abogado recibió mucha atención pública, y llamadas de familiares de personas que se consideraban injustamente encarceladas. Una de las llamadas fue acerca del caso de Toño Zúñiga.
Tras descubrir que el abogado de oficio de Zúñiga, había ejercido con una cédula profesional falsa, Roberto Hernández y su asociada Layda Negrete, inician un increíble investigación que demuestra no sólo los vicios del sistema judicial mexicano, sino también las condiciones de hacinamiento en el Reclusorio Oriente (uno de los más sobrepoblados de la Ciudad de México).
Tras su lanzamiento, la película se convirtió en un hito en la historia del cine mexicano, siendo considerada como la película documental más vista por el pueblo mexicano. Sin embargo, dos semanas luego de su estreno fue prohibida debido a un recurso de amparo por parte de uno de los testigos que participaron en el juicio, quien alegaba que no autorizó el uso de su imagen. Una serie de demandas siguieron a esta, sin embargo tras varios meses fue revocada la prohibición, y el filme siguió en exhibición.
Utilizando un punto de vista optimista, la narración nos introduce de forma cruda e impotente dentro de la burocracia judicial mexicana, que tristemente no es muy diferente a la de otros países latinoamericanos, mientras la búsqueda de la libertad choca de frente con la indiferencia y arrogancia de aquellos cuya única función es velar por la justicia…
FICHA TÉCNICA
Nombre: “Presunto Culpable” (2008)
Director: Roberto Hernández y Geoffrey Smith
Guion: Roberto Hernández
Género: Documental, Denuncia Social
País: México
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