Buscar este blog

"Cinema Paradiso"

"Cinema Paradiso"

sábado, 23 de marzo de 2019

“Bringing Up Baby / La Fiera de mi Niña” de Howard Hawks (1938) - Por Frank Binueza



David Huxley (Cary Grant) es tímido y despistado paleontólogo que está a punto de acabar la laboriosa reconstrucción del esqueleto de un brontosaurio, al que sólo le falta una clavícula intercostal. Además está a punto de casarse con su rígida. Un día antes de la boda, en un partido de golf con el abogado de una solterona millonaria, potencial mecenas del museo para el que trabaja, Huxley conoce a Susan Vance (Katharine Hepburn), una joven adinerada y rebelde que se encaprichará con Huxley y hará todo lo posible que para que no culmine ninguno de sus proyectos, obligándolo a que juntos cuiden a un joven leopardo domesticado llamado “Baby”…



“No es que no me agrades, porque, después de todo, en momentos de tranquilidad me siento extrañamente atraído a ti, pero... ¡no ha habido ningún momento de tranquilidad!”



Situaciones absurdas, travesuras inesperadas, gigantescos malentendidos, aventuras y desastres, grandes juegos de palabras, más un leopardo suelto en escena, y por supuesto comedia y romance, todo eso es “Bringing Up Baby”, una de las más desenfadadas películas protagonizadas por Katharine Hepburn al lado de Cary Grant, y que inexplicablemente fue un fracaso de taquilla durante su estreno, dándole el mote de “Veneno de Taquilla” a la Hepburn.



A pesar de ser un filme de finales de los años treinta, su alocada historia y peculiar sentido del humor la vuelve completamente atemporal, y cómo no reírnos de grandes figuras de Hollywood envueltos en la absurda captura de un leopardo de tres años llamado irónicamente “Baby”, aderezado con una serie de malentendidos, un hueso de brontosaurio perdido y un gracioso perro responsable. Si bien el filme acabó con las carreras de Katharine Hepburn y el director Howard Hawks en la legendaria RKO, el resultado valió la pena (por lo menos para las generaciones venideras).



Sin dudas una grata comedia screwball, en donde el romance y la comedia van de la mano, mientras se destacan los dotes cómicos de sus protagonistas, a la vez que no da tiempo de respirar entre las cada vez más increíbles situaciones.



FICHA TECNICA:
Nombre: “Bringing Up Baby / La Fiera de mi Niña” (1938)
Director: Howard Hawks
Guion: Dudley Nichols y Hagar Wilde, basada en el cuento corto “Bringing Up Baby” de Hagar Wilde.
Reparto: Katharine Hepburn, Cary Grant, Charles Ruggles, May Robson, Walter Catlett, Barry Fitzgerald, Fritz Feld, Leona Roberts, Ward Bond.
Género: Comedia Screwball, Comedia Romántica
País: Estados Unidos


"Roman Holiday" de William Wyler (1953) - Por Marilyn Rodríguez


ESPECIAL COMEDIAS ROMÁNTICAS
ROMAN HOLIDAY. William Wyler. 1953


-" No he estado nunca a solas con un hombre ni siquiera vestida. En ropa interior...más extraño".


Vacaciones en Roma es una cinta amable, una deliciosa fábula del cuento de Cenicienta. La princesa Ann, cansada del estricto protocolo y deberes oficiales impuestas por las exigencias de sus deberes oficiales, escapa una noche y ataviada como una chica corriente, se encuentra con el periodista Joe Bradley (Gregory Peck). Este reconoce a la princesa y ve una gran oportunidad de salvar su carrera periodística que se encuentra en horas bajas. Pero, a medida de que la va conociendo, asoma un sentimiento de culpa, dada la inocencia de Ann. Mientras recorren la ciudad de Roma, el amor surge, aunque las realidades de sus respectivas situaciones, hacen de la relación, algo imposible.


Peck y Hepburn están excelentes,la pareja protagonista tiene mucho que ver, ambos son carismáticos y deliciosos en este cuento de hadas sin final feliz y de amores platónicos de Wyler, al igual que Eddie Albert en el papel de fotógrafo que actúa en connivencia con Peck . Ese tipo de historias clásicas que no puedes evitar engancharte una y otra vez.


El recorrido que hace la pareja por los bellísimos parajes de la ciudad eterna realzan la historia. Basado en un texto de Dalton Trumbo, tuvo que pasar décadas antes de que Trumbo recibiese finalmente el reconocimiento merecido.


Frank Capra se encargó inicialmente del proyecto, pretendiendo a los actores Elizabeth Taylor y Cary Grant para los papeles de Peck y Hepburn.



"Groundhog Day / Atrapado en el Tiempo" de Harold Ramis (1993) - Por Marilyn Rodríguez



ESPECIAL COMEDIAS ROMÁNTICAS
ATRAPADO EN EL TIEMPO. Harold Ramis. 1993



-"Este 2 de febrero, a las 7:20 y 30 segundos, Punxsutawney Phil, el profeta de los profetas, el vaticinador de los vaticinadores salió a regañadientes, pero vivaz en Punxsutawney, Pensilvania. Y dijo en lengua marmota: “Definitivamente veo una sombra”. ¡Lo siento, amigos! ¡6 semanas más de invierno"!



Bill Murray, posiblemente, hace uno de los mejores trabajos de su carrera en esta genial comedia, escrita y dirigida por Harold Ramis, junto a Danny Rubin.



Murray es Phil Connors, un malhumorado hombre del tiempo al que envían, junto a la productora (Andie McDowell) y al cámara Larry (Chris Elliot) al pueblo de Punxsutawney, en Pensilvania, para documentar la ceremonia anual del día de la Marmota. Una marmota llamada Punxsutawney Phil sale de su guarida y en función de si ve o no su propia sombra, predice que el pueblo tendrá unas semanas más de invierno.


Despectivo y soberbio, a Phil no le apetece en absoluto cubrir esa noticia, así que cuando se despierta a la mañana siguiente, descubre que está reviviendo el día de la Marmota, una y otra vez al ritmo de " I've Got You Babe", de Sonny y Cher. Dada su condición, Phil sacará provecho de esta situación en beneficio propio, en un principio, y ayudando a los demás, más adelante. 




Intenta mejorar su detestable comportamiento en un intento de redimirse a los ojos de la productora.


Atrapado en el tiempo es una genial comedia, posiblemente, una de las mejores de los 90. La cinta está plagada de humor, es una comedia inteligente y divertida.


Como curiosidad, Murray fue mordido por una marmota en dos ocasiones, teniendo que ser vacunado contra la rabia.


“Requisitos para ser una Persona Normal” de Leticia Dolera (2015) - Por Frank Binueza



María de las Montañas (Leticia Dolera), es una treintañera a la que la vida no le sonríe: no tiene trabajo, la han echado de su apartamento, no tiene pareja y se ve obligada a regresar a la casa de su madre con la que tiene una relación distante. Decidida a convertirse en una persona “normal”, hace una lista de requisitos para lograrlo, haciendo un pacto con Borja (Manuel Burque), un dependiente de Ikea, al que ayudará a adelgazar mientras él procura que María salga más y consiga así ir tachando puntos de su lista



“Una persona normal es aquella que tiene un trabajo, una casa, una pareja, aficiones, vida social, vida familiar, y que… es feliz”



¿Qué es una persona normal? ¿Es necesario todo lo que aparece en la lista para serlo? ¿Quién decide ser “normal”? Todas estas interrogantes no son contestadas en este filme, y creo que nadie lo esperaba (¿quién espera encontrar respuestas en una comedia romántica?), sin embargo no se puede negar que “Requisitos para ser una Persona Normal” es una simpática (y algo hipster) mirada a la presiones que la vida diaria impone a las personas que se salen del molde tradicional.




Con una estética más cercana a las películas independientes estadounidenses, el filme marcaría el debut como directora de Leticia Dolera, quien además escribió el guion de la misma, en donde destaca su cuidada estética que rebosa de colores pasteles, el uso de animaciones que explican la narración, una interesante banda sonora, y una historia llena de situaciones y personajes extravagantes. A pesar de su exagerado tono simpático, y de caer muchas veces en el cliché o lo absurdo, el filme hace una peculiar mirada al temor de no encajar en el mundo adulto, ese miedo de no ser “normal”, pero en verdad, ¿quién quiere serlo?



FICHA TÉCNICA:

Nombre: “Requisitos para ser una Persona Normal” (2015)
Directora: Leticia Dolera
Guion: Leticia Dolera
Reparto: Leticia Dolera, Manuel Burque, Jordi Llodrà, Silvia Munt, Miki Esparbé, Alexandra Jiménez, Blanca Apilánez, Jorge Suquet, Carmen Machi, David Verdaguer, Nuria Gago, Irene Visedo.
Género: Comedia Romántica, Drama
País: España


"Everyone Says I Love You" de Woody Allen (1996) - Por Paul Torres



ESPECIAL COMEDIAS ROMANTICAS

Everyone Says I Love You / Todos Dicen I Love You (1996)

Dirección: Woody Allen

Reparto: Woody Allen, Natalie Portman, Drew Barrymore, Edward Norton, Julia Roberts, Tim Roth



Sinopsis: El matrimonio formado por Steffi y Bob es el paradigma de la familia burguesa de Nueva York: son ricos, liberales y socialmente comprometidos. Steffi estuvo casada con Joe, un tipo sin suerte con las mujeres, con quien tiene una hija algo inestable. Bob tiene un hijo conservador, una hija que ha puesto en peligro su boda al enamorarse de un delincuente y otras dos hijas adolescentes que se pelean por chicos multimillonarios. Todos ellos pasean sus problemas por Nueva York, París, Venecia. (FILMAFFINITY)



Es esta, una película al más puro estilo del genio neoyorquino, tanto en su tono, como en su estilo o temática. El factor diferencial en esta ocasión es la inclusión de números musicales en la trama.
Estas escenas son utilizadas por el director para presentar las características principales de algunos personajes, así como para transmitir ciertos mensajes de crítica o incluso algunos retazos muy ligeros de una filosofía de vida. Pero, sobre todo, son empleadas para divertir, objetivo que cumplen sin duda alguna.



Pero pronto aparece Woody Allen, interpretándose una vez más a sí mismo, y la película empieza a adquirir esa naturalidad, ese fluir continuo que le faltaba. Una de las críticas que se le hizo a la película fue el exceso de lugares comunes que muestra. Este personaje es uno de ellos, pero funciona a la perfección, de manera fresca una vez más, y una vez más es un placer verlo.



“Todos dicen I love you” es quizá la película que más insufla de vida a quien la ve de todas las que Allen ha realizado. Es al fin y al cabo una canción, una canción a la vida, una de esas cuya letra no te conmueve, pero cuya melodía, enérgica y vital anima a quien la escucha.


lunes, 18 de marzo de 2019

"Punch-Drunk Love / Embriagado de Amor" de Paul Thomas Anderson (2002) - Paul Torres



ESPECIAL COMEDIAS ROMÁNTICAS

PUNCH-DRUNK LOVE - EMBRIAGADO DE AMOR (2002)

Dirección: Paul Thomas Anderson



Sinopsis: Barry (Adam Sandler) es un tipo solitario y poco sociable que fue educado entre siete hermanas. La sobreprotección que se le dispensó desde niño le ha impedido enamorarse. Un día descubre un fallo en un concurso con el que tiene intención de ganar miles de millas en billetes de avión. Mientras tanto, por mediación de su hermana conoce a una misteriosa mujer (Emily Watson) con la que inicia una romántica aventura. (FILMAFFINITY).



Raro, extraño, o su equivalente inglés “Freak”, son los adjetivos que definen el estilo del film de Anderson, acompañado todo ello de una música desquiciada, muy lejos de las habituales percusiones de los films de tono romántico.


Las situaciones surrealistas son moneda de cambio (fundidos en color arco-iris, accidentes sin sentido, un armonio abandonado en medio de la calle, un colchonero dueño de una línea caliente, los repentinos ataques de ira de Adam Sandler), que tienen su momento más divertido en un momento en el que el almacén donde trabaja Sandler se convierte en lugar de reunión entre él, su hermana, el personaje de Emily Watson, habiendo de fondo una persistente llamada de teléfono, un accidente laboral y la desquiciada banda sonora.


El principal hándicap del film estriba en su guión, que aunque plantea con acierto situaciones surrealistas, que se toman como verdaderas, carece de suficiente hilo argumental para mantener atrapado al espectador, de manera que el metraje acaba haciéndose largo, pese a no durar ni hora y media.


Buenas actuaciones de Sandler y Watson, el primero muy alejado de las gamberradas que suele hacer.


"Four Weddings and a Funeral / Cuatro Bodas y un Funeral" de Mike Newell (1994) - Marilyn Rodríguez



ESPECIAL COMEDIAS ROMÁNTICAS
CUATRO BODAS Y UN FUNERAL, Mike Newell, 1994


“- Charles: ¿Cómo está tu novia? 
- Ya no es mi novia. 
- Me alegro. No se si sabías que se la tiraba la mitad del grupo. 
- Ahora es mi mujer.”



'Cuatro bodas y un funeral' ('Four Weddings and a Funeral') es una de las comedias románticas más emblemáticas de los años 90. Hugh Grant es el sempiterno padrino de boda en esta comedia británica de ceremonias sociales ,en la que Nevell y Richard Curtis obtuvieron un gran éxito, convirtiendo a Grant en estrella de Hollywood. El papel se le adecua bien a Grant, como Charles, el padrino que siempre llega a tarde, y que se enamora de Carrie (Andy MacDowell) en una de las bodas, pasando el resto de la cinta cortejándola de una manera torpe.



Cuatro bodas y un funeral es una mirada cargada de humor hacia la clase media alta británica, en la que se reflejan todas las pesadillas clásicas de este tipo de ceremonias, a saber: el cura incompetente, el padrino indiscreto, lo violento de sentarse en la misma mesa con los ex. El funeral da título a la parte conmovedora del relato.



Con un elenco bien escogido en el que todos están magníficos y temas como "Love is all around", del grupo escocés Wet Wet Wet, Cuatro bodas y un funeral resulta una cinta encantadora con momentos divertidos,mientras se entrecruzan las vidas de un grupo de amigos a través de distintos eventos, amores y desamores, reflexiones sobre la relaciones y el matrimonio.


“Celeste and Jesse Forever” de Lee Toland Krieger (2012) - Por Frank Binueza





Celeste (Rashida Jones) y Jesse (Andy Samberg) han sido los mejores amigos desde la escuela, casándose siendo bastante jóvenes. Ahora ambos rondan los treintas, llevan seis meses separados en proceso de divorcio, viven en la misma casa y siguen siendo los mejores amigos de siempre. Cuando deciden ver a nuevas personas, Jesse acepta pasivamente ya que está seguro del amor de Celeste, sin embargo la situación da un giro inesperado, poniendo su peculiar relación en riesgo.



“Han estado separados por seis meses. ¡Se están divorciando, y pasan todo el día juntos como si no fuera la gran cosa!”



El cine independiente estadounidense a veces trae interesantes sorpresas con películas que en apariencia, no son demasiado atractivas. “Celeste and Jesse Forever” es una de ellas, durante sus primeros minutos parece la clásica comedia romántica llena de clichés y cursilerías, pero tras ese breve interludio, la página da vuelta, parece que nos perdimos de una gran historia de amor, y vemos lo que viene después de eso. Una extraña separación.



¿Qué es más importante en un matrimonio? ¿El amor o la complicidad?, eso es lo que tienen que descubrir los protagonistas de la cinta, para quienes la amistad parece ser mucho más fuerte que el amor que todavía se tienen. A pesar de ambos viven en una aparente utopía de apoyo siendo partes vitales uno en la vida del otro, el punto de quiebre de su relación muestra sus verdaderas caras, en donde las inseguridades propias y los anhelos de lo que no será, hacen que el filme pase rápidamente de la comedia romántica al drama y viceversa, dejándonos con la interrogante ¿Puedo ser amigo de mi ex…?



FICHA TÉCNICA
Nombre: “Celeste and Jesse Forever” (2012)
Director: Lee Toland Krieger
Guion: Rashida Jones y Will McCormack.
Reparto: Rashida Jones, Andy Samberg, Emma Roberts, Elijah Wood, Eric Christian Olsen, Ari Graynor, Janel Parrish, Sarah Wright, Chris D'Elia, Chris Messina, Rafi Gavron, Will McCormack.
Género: Comedia Romántica, Drama, Cine Independiente
País: Estados Unidos




"The Purple Rose of Cairo / La Rosa Púrpura del Cairo" de Woody Allen (1985) - Por Marilyn Rodríguez



ESPECIAL COMEDIAS ROMÁNTICAS
LA ROSA PÚRPURA DEL CAIRO, Woody Allen, 1985


-“Acabo de conocer a un hombre maravilloso; es de ficción, pero no se puede tener todo.”



Allen, con esta maravillosa comedia nostálgica, se aleja de sus personajes habituales neoyorquinos con problemas en sus relaciones personales; tampoco encontraremos en La Rosa Púrpura del Cairo, los habituales monólogos neuróticos y filosóficos, característicos del cine de Allen. 


Un ejercicio de meta cine o un delicioso retrato sobre la realidad y la fantasía, o ambos. La cinta narra la historia de Cecile (Mia Farrow), una infeliz camarera, que durante los años de la Gran Depresión, pasaba la mayor parte de su tiempo libre en una sala de cine. “Me ayudan a olvidar a mis penas”, confiesa Cecilia quien vive con su marido, un hombre desempleado, rudo y maltratador (Danny Aiello). Solo a través de la pantalla, ella puede olvidarse de la anodina y desgraciada vida que lleva. Después de quedar fascinada por la última película que estrenan en el cine de su barrio titulada “La rosa púrpura del Cairo” a la que acude, sale de la pantalla hacia el mundo real para conocerla. Ambos se enamoran, hasta que aparece el actor que interpreta a Tom en la vida real de la película, que también la seduce.



Por todos es conocido el hecho de que en los años de la Depresión, los estadounidenses necesitaban el optimismo del cine, en el que buscaban evasión y olvidar sus vidas y los problemas de esos negros años. La Rosa Púrpura del Cairo es un ejemplo de cómo las películas de los años 30 distorsionaban la realidad creando expectativas peligrosamente altas, pero al mismo tiempo hacían la vida más llevadera al público estadounidense.


Daniels, asume ambos roles, el personaje de ficción y el actor que interpreta a Tom, estableciendo una clara diferencia entre el hombre ideal y el real.



“Los seres de ficción quieren tener una vida real y los seres reales una vida de ficción”. Esta frase, resume por sí sola la cuestión principal que aborda Woody Allen en esta deliciosa película sobre la ilusión, sobre la ficción que puede salvar nuestras vidas.


"The Philadelphia Story / Historias de Filadelfia" de George Cukor (1940) - Por Paul Torres



ESPECIAL: COMEDIAS ROMANTICAS

HISTORIAS DE FILADELFIA (1940)

Dirección: George Cukor

Reparto: Cary Grant, Katharine Hepburn, James Stewart, Ruth Hussey, John Howard



Sinopsis: La mansión de los Lord se prepara para celebrar la segunda boda de Tracy Lord (Katharine Hepburn) con el rico George Kittredge (John Howard). Para inmortalizar los festejos una pareja de periodistas, Macauley Connor (James Stewart) y Elizabeth Imbrie (Ruth Hussey), son invitados especialmente por C.K. Dexter Haven (Cary Grant), el primer marido de Tracy. (FILMAFFINITY).



Tras un enorme éxito como obra de teatro en Broadway, "Historias de Filadelfia" saltó a la gran pantalla por el empeño personal de Hepburn, que ya había protagonizado la historia sobre las tablas y que recibió los derechos para su adaptación cinematográfica como un regalo por parte de su entonces pareja, Howard Hugues.

La película se estrenó en 26 de diciembre de 1940 en Nueva York y fue un éxito inmediato, relanzando la carrera de Hepburn y asentando las de Grant y Stewart.



Fue nominada a seis Óscar: mejor película, director, actor y actriz protagonistas, secundaria y guión, pero solo los lograron James Stewart y el guionista, Donald Ogden.

Hepburn, que había ganado la estatuilla en 1934 por "Morning Glory" y que logró su tercera nominación, lo perdió frente a Ginger Rogers, que se hizo con el premio por "Espejismo de amor", una película que ella había rechazado protagonizar.


"JFK" de Oliver Stone (1991) - Por Marilyn Rodríguez



LA CORRUPCIÓN EN EL CINE
JFK, Oliver Stone, 1991



El Fiscal de Nueva Orleans Jim Garrison reabrió el caso del asesinato del presidente de los Estados Unido,s John F. Kennedy y presentó cargos contra algunas personas. Después de entrevistar a numerosos testigos de Dallas y a personas relacionadas con los hechos, mantuvo la tesis de que el magnicidio fue fruto de una conspiración en la que podría haber intervenido el FBI, la CIA y el propio vicepresidente Lindon B. Johnson.



-“El fantasma de John Fitzgerald Kennedy nos enfrenta al asesinato secreto del sueño americano, nos obliga a responder unas preguntas terribles: ¿Qué es nuestra Constitución?, ¿Qué vale la ciudadanía?...o más aún: ¿Qué vale nuestra vida?¿Qué futuro tiene una democracia cuyo presidente puede ser asesinado en circunstancias terriblemente sospechosas, mientras la maquinaria legal ni siquiera se inmuta?, ¿Cuántos asesinatos de políticos disfrazados de ataques al corazón, suicidios, cáncer, sobredosis nos quedan por ver?, cuántos aviones y coches se estrellarán hasta que se sepa qué es lo que realmente esconden?”.



Basada en las novelas “On the trail of the assasins” de Jim Garrison, el propio protagonista de la película, y “Crossfire: the plot that killedKennedy”, de Jim Marrs, Zachary Sklar y el propio Oliver Stone, adaptan uno de los hechos sucedido el 22 de noviembre de 1963 en Dallas, más escabroso y con más preguntas e interrogantes sin respuesta de la reciente historia norteamericana. Stone realiza de una manera acertadísima y certera un complejo thriller político, en el que resalta un prodigioso montaje a cargo de Joe Hutshing y Pietro Scalia con un gran ritmo y tensión narrativa, que en otras manos, hubiera dado como resultado un producto complejo y difícil de entender para el espectador.



Así, la película se inicia con una mezcla entre imágenes documentales e imágenes de ficción, alternado el color con el blanco y negro, lo que resulta un excelente trabajo de fotografía a cargo de Robert Richardson consiguiendo con ello un toque semi documental. A través de ellas asistimos a un recorrido político, económico y social de los Estados Unidos en la primera mitad de la década de los sesenta. Garrison revisa el resultado y contenido de los documentos de la Comisión Warrren. Dicha comisión se inició el 29 de noviembre de 1963 a instancia del Presidente Lyndon B. Johnson con el fin de esclarecer el asesinato de John F. Kennedy. La comisión concluyó estableciendo que el presidente recibió tres impactos disparados con la misma arma desde el sexto piso del depósito de libros de la ciudad de Dallas por Lee Harvey Oswald, un ex oficial de la marina de los Estados Unidos tildado de comunista fanático. También concluía la comisión, la exculpación del cuerpo de policía por la muerte de Oswald a manos de Jack Ruby delante de la misma y la prensa, descartando cualquier teoría conspiratoria.



Garrison encuentra multitud de contradicciones, parcialidad y desidia en la investigación, por lo que decide reabrir el caso para investigar los hechos, hallar nuevas pruebas y buscar culpables, teniendo la firma convicción de que de ningún modo pudo ser un lobo solitario el autor del crimen, sino toda una conspiración contra el presidente desde las más altas cotas de poder.



Además de la acertada inserción de la partitura de John Williams, la cinta cuenta, además de Kevin Costner, que aquí ofrece uno de sus mejores trabajos, con la participación de unos de los mejores elencos que se hayan visto jamás en el cine, tales como Gary Oldman, Joe Pesci, Donald Sutherland, Sissy Spacek, Tommy Lee Jones, Kevin Bacon, Jack Lemmon y Walter Matthau. Apareciendo, asimismo, el propio Jim Garrison dando vida a Earl Warren, que estuvo al frente de la controvertida Comisión Warren.



A Oliver Stone le salió un film redondo, unos de sus mejores trabajos, en mi opinión, de este director. Un film grande que supo manejar perfectamente en el que además de dominar a la perfección una complicada trama política, y la convicción de la corrupción en la gran y complicada maquinaria política estadounidense, señalando posibles culpables, ofrece una precisa radiografía sobre el mundo en la década de los sesenta: la meteórica carrera espacial de las dos superpotencias, Rusia, la guerra fría, Fidel Castro, Bahía de Cochinos o Vietnam.


"Cien Años de Perdón" de Daniel Calparsoro (2016) - Por Marilyn Rodríguez


LA CORRUPCIÓN EN EL CINE 
CIEN AÑOS DE PERDÓN, Daniel Calparsoro, 2016



Una mañana lluviosa, seis hombres disfrazados y armados asaltan la sede central de un banco en Valencia. Lo que parecía un robo limpio y fácil pronto se complica, y nada saldrá como estaba planeado. Esto provoca desconfianza y enfrentamiento entre los dos líderes de la banda, “El Uruguayo” y “El Gallego”. Pero ¿qué es exactamente lo que buscan los atracadores?


Primera hora de la mañana. La sede central del Banco Mediterráneo acaba de abrir sus puertas al público. Fuera llueve torrencialmente. Un grupo formado por seis hombres encapuchados entra en el establecimiento con el objetivo de robar todas las cajas de seguridad que puedan. A priori, el plan no presentaba ninguna complicación, ya que previamente se había excavado un túnel que conectaba el banco con una estación de metro en desuso. 


No será la única complicación que se les presente, puesto que la intensidad de la lluvia ha provocado que el túnel se inunde por completo impidiendo la huída.


Los líderes de la banda son “el uruguayo” (Rodrigo de la Serna) y “el gallego” (Luís Tosar) ambos son viejos conocidos, ya han perpetrado algún golpe juntos; el uruguayo es el encargado de negociar con la policía sus exigencias para salir del edificio con el botín. La vida de los rehenes sirve de moneda de cambio. 


El contenido de una de las cajas de seguridad y objetivo del líder de la banda, pondrá en solfa a todo el gobierno del país, puesto que es el propio gabinete, el interesado en hacerse con el contenido de la caja, cuyo propietario es un ex miembro del partido, ahora en coma en un hospital. La desconfianza y la sospecha se va instalando entre los dos atracadores a medida que surgen las complicaciones. 


De la negociación, por parte de los cuerpos de seguridad, se hará cargo un experimentado y alto cargo del CNI (José Coronado), el cual tendrá carta blanca para dirigir la operación al margen de los otros cuerpos policiales que ignoran el entramado político. A su vez, el jefe del gabinete de la Presidencia (Raúl Arévalo) intentará por todos los medios que el contenido de la caja de seguridad no salga a la luz pública, puesto que provocaría un gran escándalo de corrupción política de grandes consecuencias, llegando a desestabilizar los cimientos gubernamentales. Así, ejerciendo toda la presión posible hacia los atracadores, donde la suerte de estos no les importa demasiado, sino conseguir la comprometida documentación, se iniciará un asedio y derribo; una carrera contrarreloj para la huida desesperada y, de paso, salir vivos.


No estamos acostumbrados en este país a las producciones de este género, a los thrillers, al cine de robo y atracos o, en general a las cintas de acción y aún menos, con un atraco de por medio. Ver que de vez en cuando hay algún valiente que se lanza a la piscina con algo semejante, es muy loable y de agradecer. 


Coproducida por España y Argentina y con guión de Jorge Guerricaerrechevarría, responsable del guión de “Celda 211” (Daniel Monzón, 2009) “Carne Trémula” (Pedro Almodóvar, 1997) o “El día de la bestia” ( Alex de la Iglesia,1995 ) Cien años de perdón es una cinta muy entretenida y un buen Thriller. Rodada a caballo en Argentina y España con actores de ambos países. Calparsoro le otorga buenas dosis de tensión a la narración, fluida y rápida en su primera parte, muy efectista visualmente, así como una buena puesta en escena, consiguiendo mantener la atención del espectador en todo momento. 


Destaca la interpretación de la pareja protagonista, donde si el gran Luis Tosar, está magnífico (¿cuando no lo está?) el argentino Rodrigo de la Serna está aún mejor, alzándose como triunfador en este duelo actoral y transmitiéndonos una buena química entre ambos.


Un entramado de corrupción política y engaños que por desgracia nos es muy familiar en nuestro país, desde años, aunque la realidad supera a la ficción, en este caso, pese a que el director de obras como “Salto al vacío” (1995) niegue que sea una cinta política y así lo manifiesta:-“ Cien años de perdón’ se plantea como una película de atracos, como una película de género, de entretenimiento. Estamos buscando hacer un retrato de la sociedad española con una mirada cargada de ironía para sacarle una sonrisa al espectador. Pensamos que si íbamos a tratar el tema de la corrupción como trasfondo que había que hacerlo de una forma que no fuera un coñazo. Si no sería como el telediario, lo que vemos todos los días en los periódicos. Tampoco queríamos dar una lección, queríamos proponer una fiesta con todo esto”.


Ya lo decía Bertold Brecht:" que ladrón no es quien roba un banco, sino quien lo funda”. No es de extrañar que con la que está cayendo, empaticemos con los atracadores, poniéndonos de su lado, puesto que los malos no son tan malos, ni los buenos, tan buenos.


Si bien es cierto que Cien años de perdón no pasará a la historia como una de las mejores películas de la historia, sí que es una buena recomendación para el puro entretenimiento.


"Traffic" de Steven Soderbergh (2000) - Por Marilyn Rodríguez



LA CORRUPCIÓN EN EL CINE
TRAFFIC, Steven Soderbergh, 2000


El tema de la droga ha sido tratado infinitas veces en el cine desde todas las ópticas posibles, especialmente desde el infierno y sufrimiento que produce a los que la consumen. Pero Traffic no es otra película temática más. Soderbergh ha resuelto el tema desde varias vertientes, construyendo una trama argumental que aúna diversas tramas paralelas que se entrecruzarán en algún momento.


Así, encontramos al Juez Wakefield (Michael Douglas), nombrado recientemente por el Presidente de los EEUU para coordinar con las autoridades mexicanas la lucha contra la organización de drogas. El mismo Juez que tendrá que librar esa batalla en su propia casa, ya que ignora que tiene una hija adolescente drogodependiente.



Javier Rodríguez (Benicio del Toro), un agente mexicano de la frontera que camina entre la honestidad y la lucha por el mantenimiento del orden en Tijuana, y su propia corrupción.
Helena Ayala (Catherine Zeta-Jones) de buena posición; esposa de un respetable hombre de negocios que es un traficante de drogas, hecho que desconoce hasta el mismo día de su detención. Determinada a sacar a su marido de la cárcel con la ayuda del Abogado (Dennis Quaid) y a seguir con el negocio para no poder su posición social.



En el sólido guion de Stephen Gaghan se mezclan el thriller, el drama, la denuncia social y de documental en las secuencias rodadas cámara en mano; se hablan dos idiomas, el inglés y el español, para relatar la historia de varios personajes relacionados, todos ellos, con el mundo de las drogas y el narcotráfico existente entre los Estados Unidos y México.



Estamos ante una buena película, una película dinámica, cruda y sólida, con excelentes actuaciones, destacando la de Benicio del Toro y Michael Douglas, dura y real, como su argumento, magníficamente montada por Stephen Mirrione, ya que el montaje en films con historias cruzadas es de vital importancia para darle sentido y coherencia a la historia. La fotografía sirve como ubicación de los lugares y el contraste entre los mismos. Así, se utiliza los colores azules cuando la acción transcurre en espacio norteamericano, y el amarillo o sepia cuando transcurre en territorio mexicano.



Si existe algún elemento de crítica contra esta película, en mi opinión sería la visión algo hipócrita que muestra que las consecuencias sufridas por las drogas en la población americana es gracias a los narcos chicanos. Aun así, Traffic resulta una sórdida aproximación al mundo del narco tráfico. Un gigante en la que la lucha contra el mismo es inútil y está a priori, perdida, sin solución ni erradicación posible, por su estructura y agravado por la corrupción que lleva inherente el ser humano.


domingo, 17 de marzo de 2019

"The Racket / El Soborno" de John Cromwell (1951) - Por Marilyn Rodríguez



LA CORRUPCIÓN EN EL CINE 
EL SOBORNO (The Racket) John Cromwell, 1951



-“Pretenden crear un enorme monopolio que controle todos los negocios ilegales; el juego, la corrupción, la droga…eso le daría mucho dinero; una gran parte de ese dinero se destinaría a sobornos. Ya tienen al ayudante del Fiscal en su nómina, Mortimer Wils, quieren que sea Juez y, una vez esté en el estrado”….
-“Lo que está usted diciendo es muy grave, tiene que demostrarlo”
-“Necesitamos pruebas, pero lo que realmente necesitamos es presentar esas pruebas justo antes de las elecciones”.



La corrupción se ha instalado en el país así como en todas las instituciones, incluso en la propia policía. El Sindicato del Crimen controla la ciudad. Nadie sabe quién es su jefe, nadie lo ha visto, pero todo el mundo le llama "el Anciano". El capitán Thomas McQuigg,(Robert Mitchum) un honrado agente de policía y, uno de los pocos en que la corrupción no ha hecho mella, ha sido trasladado por sus superiores a una comisaría de distrito para mantener el orden y limpiar la ciudad de asesinos y maleantes Pese a tan ardua empresa, él no se rinde , no poder confiar en nadie más que en sí mismo y con la ayuda de Bob Johnson, un policía tan íntegro y valiente como el propio capitán Mc Quigg, emprenden una implacable cruzada contra el gánster, Nick Scanlon, (Robert Ryan) quien controla todos los mecanismos de la Ciudad. El objetivo es arrestar a Scanlon y para darle caza, arrestan al hermano de éste y a su amante, Irene Hayes,(Lizabeth Scott), una cantante de segunda fila.



La mafia había conseguido la tolerancia y el trato de favor por parte de diversos estamentos gubernamentales, tales como funcionarios, políticos, jueces y policías corruptos. Aquel apoyo fue la causa para que se consolidara en el país, durante casi treinta años, los negocios tradicionales de la mafia, alcanzando, por ello, una auténtica época dorada.


Pero toda esta situación de impunidad cambió cuando en 1950 se creó en los Estados Unidos la Comisión Kefauver, presidida por el senador Estes Kefauver, quien inició una cruzada contra el crimen organizado interestatal. Dicho comité se extendió por cada rincón de cada ciudad, citando a prestar declaración como testigos a los mafiosos de cada territorio, siendo televisadas dichas declaraciones y haciendo partícipes de las mismas al ciudadano norteamericano desde sus casas.


Por encargo de Howard Hughes, con guión de William Haines, W.R. Burnett, después de que Hughes despidiera a Samuel Fuller por disgustarle todo lo que había escrito y, dirigida por John Cromwell, autor de obras como “Cautivo del deseo” (1934), El prisionero de Zenda (1937), y las magistrales “Desde que te fuiste” (1944), “Callejón sin salida” (1947) o “Sin remisión” (1950), “El soborno” en la que también intervinieron como directores Mel Ferrer y Nicholas Ray, es un remake de la realizada en 1928 por Lewis Milestone.


El soborno es una cinta creo que no lo suficientemente conocida, pero muy recomendable del género noir. Una lucha de David contra Goliat, perdida de antemano, con inferioridad de recursos, y en la que la corrupción gana por goleada a la escasa honradez, Un repaso a los métodos mafiosos imperantes y sus tejemanejes con jueces, fiscales, senadores o políticos.



Rodada con abundantes planos cortos y fotografiada en blanco & negro por George E. Diskant con algunas sombras y con una potente música, ya desde los títulos iniciales, de Paul Sawtell, Robert Mitchum interpreta al capitán Thomas McQuigg, aunque su estelar aparición y presentación en la comisaría (una larga escena magníficamente rodada) se hará esperar hasta bien pasados los primeros veinte minutos de la cinta, como adalid en su carrera en solitario para combatir la corrupción imperante. El antagonista es Robert Ryan, actor sólido donde los haya, es el gángster Nick Scanlon, un personaje repleto de fuerza, vigor, maldad, violencia y carente de escrúpulos. Personaje que en manos de otro actor con menos pericia, hubiese resultado excesivo, pero Ryan está perfecto. Ambos despliegan su talento en sendas interpretaciones. 


“El soborno” es un buen producto del género, realizada con buen ritmo y con tan solo ochenta y ocho minutos de metraje, de los que resulta siempre agradable su revisión o una muy buena recomendación para los que la descubran por primera vez. El argumento, no ha envejecido ni ha quedado obsoleto, es perfectamente aplicable a nuestra sociedad actual y a alguna que otra institución. Pero eso ya es otro tema.